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La Isla feliz es un destino ideal para celebrar las fiestas navideñas y recibir un año nuevo muy fiel a sus tradiciones.

La diversidad que se encuentra en Aruba, de más de 90 nacionalidades, se refleja de manera colorida y alegre en las tradiciones navideñas, ya que son un popurrí de costumbres adaptadas de una variedad de culturas que allí se entremezclan como un crisol único y fascinante.

Luces, decoraciones navideñas, deliciosos platos y mucha calidez de hogar es lo que más resalta en Aruba, en un año en el que las festividades decembrinas serán un poco diferentes por razones ya conocidas, pero que igual trasmitirán el mismo calor y amor de siempre, con todos los protocolos de seguridad en pie.

TRADICIONES Y COSTUMBRES

Sinterklaas es el equivalente holandés de Santa Claus, y fieles a sus raíces holandesas, los arubeños celebran la tradición de este santo. A mediados de noviembre, los arubeños le dan la bienvenida, mientras navega hacia el puerto de Aruba desde España.

En los días previos a su fiesta, el 6 de diciembre, Sinterklaas, con su larga barba blanca, túnica de obispo y bastón dorado, hace apariciones en escuelas y tiendas de toda la isla. Su siempre divertido Zwarte Pieten está siempre a cuestas, llevando sacos llenos de golosinas para los niños.

Las más esperadas de todas son las tardes previas, e inclusive en la noche del 5 de diciembre, cuando Sinterklaas deja letras y monedas de chocolate, galletas de jengibre y pequeños juguetes en los zapatos de los buenos niños y niñas de Aruba.

En los días entre Navidad y Año Nuevo, las empresas y residencias locales encienden pagaras -largas hileras de petardos chinos- para protegerse de los espíritus malignos durante el próximo año.

La duración de una pagara a veces refleja el éxito de un negocio en el año anterior, ¡y algunas pagaras pueden durar hasta media hora una vez encendidas!

El encendido de una pagara no es poca cosa: el evento se programa con días de anticipación para que puedan asistir tantos espectadores como sea posible. Sin embargo, este año las pagaras solo se encenderán sin esperar público alrededor protegiendo la salud de los locales.

¡Recibir el Año Nuevo en Aruba se disfruta como ningún otro! Durante unos días después de Navidad, los fuegos artificiales se venden legalmente en la isla. Tan pronto como se pone el sol en la víspera de Año Nuevo, los cielos de Aruba comienzan a brillar con coloridos fuegos artificiales en los vecindarios de la isla. A medida que se acerca la medianoche, el espectáculo nocturno se convierte en una exhibición impresionante acompañada de muestras profesionales producidas por varios complejos turísticos.

Durante casi una hora, tiene garantizado un asombroso espectáculo panorámico de luces que se apodera de los cielos de Aruba. Los espectadores podrán disfrutarlas desde el lugar en donde se encuentren evitando las aglomeraciones, respetando el distanciamiento social y haciendo uso del tapabocas en todo momento.

Desde la víspera de Año Nuevo hasta la Epifanía (6 de enero), los músicos, amigos y familiares se unen y visitan hogares en toda la isla, cantando solo una canción especial que se compone de una bendición, un deseo para el nuevo año, en papiamento, y tocando instrumentos típicos de cuerda y percusión como tambores. Pero este 2020 no se hará, dando cumplimiento a los protocolos de bioseguridad establecidas en la isla y para proteger la salud de los residentes.

En cuanto a la gastronomía, los platos típicos son ponche de crema, hallacas, gaitas, casi di luz, taai-taai, pepernoot, speculaas y stroopwafel. Muchas de ellas son un regalo tradicional de vacaciones adoptado por las Américas.

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